Las enfermedades cardiovasculares son en la actualidad responsables de 17,5 millones de muertes prematuras en el mundo. Los expertos estiman que si no cambiamos nuestros hábitos esa cifra crecerá y hasta alcanzar los 23 millones de fallecimientos en el año 2030.
Por eso todos los 29 de septiembre se celebra el Día Mundial del Corazón y desde el centro de día Sonraíz queremos hacer hincapié en la precaución que tenemos que tener con la salud de nuestros mayores. Es en esta etapa donde las dolencias cardiacas se presentan con mayor intensidad. De ahí la importancia de la protección frente a la enfermedad cardiovascular.
La edad no significa que tengamos que descuidar sus cuidados y menos teniendo en cuenta que gran parte de los mismo no difieren de los que tienen que tener en cuenta los jóvenes. Una buena alimentación o la precaución ante la acumulación de sal, azúcares o grasas son premisas que están siempre presentes en nuestra cocina. El envejecimiento es un proceso natural que afecta a todos nuestros órganos, incluido el corazón. Con el paso de los años su capacidad de adaptación disminuye.
En Sonraíz recomendamos a nuestros usuarios un chequeo anual y siempre tenemos en cuenta que los adultos mayores con asma o problemas respiratorios pueden ser más propensos a sufrir problemas al corazón.
Cumplir años no es sinónimo de estar parado. Cuando la capacidad física lo permita debemos procurar que nuestros mayores se muevan, caminen, naden o anden en bicicleta.
Aunque debemos tener siempre presente la edad de la persona y su grado de entrenamiento -no es lo mismo para aquella que empieza siendo mayor que para quien lleva años realizando alguna actividad-. Los principales factores de riesgo en los ancianos son la hipertensión arterial y la diabetes.